Editorial

¡Hola!

Mi nombre es Saiannah y soy una venezolana en Toronto algo aburrida de todo e impresionada por nada. Hace seis años emigré, y bueno, los últimos años han sido una espiral de primeras veces y profundas zancadillas; pero ya hoy puedo decir que voy a ser ciudadana canadiense, lo cual se siente como el fin de una era. Emigrar a Canadá implica rituales de fuego, por lo que cuando encuentras tu manera de establecerte, te obsesionas con ellos. Por lo que, desde hace algo de un año y medio para acá, me he obligado a mí misma a examinar en dónde estoy y en qué se ha convertido mi vida luego del proceso canónico.

Inicialmente, me impactó encontrarme tan poco satisfecha con la forma en la cual ha sido retratada la infame crisis migratoria venezolana. Como alguien que emigró en 2018, siempre me dio la impresión de que se hablaba demasiado de la crisis y poco de nosotros. Es muy sencillo pensar que tus carencias son pequeñas frente a la dimensión del crimen que hoy en día reside en el país. Sin embargo, los momentos que hemos colectivamente perdido a raíz de las distancias son demasiados como para intentar hacer un esfuerzo racional de tratar de evaluar numéricamente el daño; es sencillamente imposible.

Pero la ausencia no solo trajo consigo nostalgia, sino también inspiración, por lo que se me ocurrió escribir un libro, y cuento largo corto, ¡véanos acá, bienvenido a Memorias nómadas!, mi querido lector. Una esquina del Internet donde celebramos lo que somos más allá de la nube negra; nosotros somos valientes, necios e imprudentes, que sin mayores herramientas nos enfrentamos a un sinfín de incógnitas sin más certeza que el: no puede ser peor que esto.

Esta esquina pretende convertirse en un recopilatorio de cómo la diáspora venezolana ha crecido en los últimos años y en qué se ha transformado gracias a la culturalidad y los tiempos interesantes que vivimos hoy en día. A través de la recopilación de experiencias y recursos útiles que han facilitado algunos de los retos migratorios y personales que hemos enfrentado en los últimos años. Ya que, si algo hemos de admitir, ser venezolano, hoy más que nunca es una experiencia muy distintiva.

Al mismo tiempo, te contaré de las victorias y tragedias de escribir un libro. Mi idea es recopilar crónicas de mis amigos venezolanos alrededor del mundo y tratar de construir una imagen de sus últimos días en Venezuela y cómo se han adaptado y superado en sus países de residencia. Por lo que he pasado mucho tiempo entrevistando personas muy queridas y teniendo conversaciones increíbles que quedarán plasmadas acá, como un esfuerzo de incluir la mayor cantidad de voces posible.

Como comentaba hace un par de líneas, vivimos tiempos interesantes y, honestamente, sentarse a mirar se siente como un honesto privilegio, por lo que me emociona increíblemente comenzar esta aventura. A donde vaya a parar es muy incierto, pero lo increíble de todo es que a donde sea que me lleve, tengo la certeza de que será fantástico. Por lo que asumo mi autoimpuesta misión, gracias por dedicarle tiempo a estas palabras, espero me acompañes :)

Atte. Saiannah.

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