Cómo alimentarnos? El Nivel Humano
Escribí en un artículo anterior sobre la buena alimentación desde tres niveles: terrestre (el alimento propiamente tal), humano (la mente, los sentimientos, las relaciones humanas, la vida social) y el espiritual (oración, meditación, atención plena y otras prácticas).
En esta oportunidad veremos el nivel humano, pero también llevado al nivel terrestre.
Alimentarnos en ese nivel humano implica nutrirnos de otros elementos como pueden ser la generosidad, la bondad, la paciencia y la honestidad. También implica transformar el sufrimiento, la tristeza en una plenitud perdurable en el tiempo.
Una extraordinaria manera para alimentar el corazón y la mente, compartir alegría y disfrute y fomentar relaciones sociales amables es compartir en torno a una mesa de quesos.
En lo personal cada vez que comparto una mesa así, de buena y sincera conversación, donde cada quien come a su ritmo, se escucha música agradable y se alargan las horas en un plácido deleite, la sensación de bienestar me acompaña posteriormente durante muchos días.
Por eso quiero invitarte a que prepares tu propia tabla de quesos cuando quieras deleitar a tus amistades y para ello te daré algunos consejos.
1. Tener siempre presente para cuántas personas se servirá
2. Se servirá antes de una comida, ¿como un aperitivo, como un paso después de la comida al estilo francés o será el centro de una fiesta?
De estas preguntas depende el tipo, la cantidad de quesos a usar y la cantidad total de cada uno de ellos.Por ejemplo, si sirve queso antes de una comida, lo recomendable es un queso de sabor suave como por ejemplo mozzarella o una ricota con hierbas. Si lo sirve después de la cena, pueden valer tanto quesos de sabor suave como los de sabor más intenso como por ejemplo queso Manchego o variedades que queso azul.
3. Cuando la fiesta gira en torno a la mesa de quesos puede seguir una de estas líneas:
Piense en un tema: quesos españoles, italianos, franceses o locales (Por ejemplo, en Venezuela: queso andino ahumado, queso palmizulia, queso perijanero, queso concha negra, queso guayanés, queso de mano, suero fresco aliñado).
Escoja un queso por cada tipo de leche: vaca, cabra, oveja, búfala.
Escoja variedades de queso elaborados con el mismo tipo de leche: Pecorino, Manchego, Roncal, Feta (oveja).
Seleccione diferentes quesos dentro de la misma categoría por ejemplo quesos madurados suaves como el Camembert y el queso Brie, o diferentes quesos azules.
Seleccione quesos de diferentes texturas: cremosos, suaves, semiduros, duros.
La tradición francesa dice servir números impares de quesos: 3, 5, 7.
Algunas escuelas piensan que la manera de ordenarlos en el plato es en dirección de las agujas del reloj, del sabor más suave al más fuerte.
4. Tips para servir la mesa o plato de quesos.
Asegúrese que los quesos estén a temperatura ambiente (sacarlos de la nevera al menos una hora antes) En caso de clima muy caluroso, el tiempo previo a sacarlos del refrigerador sería menor.
Sírvalos con panes o galletas neutras. Los panes con hierbas, ajonjolí o condimentos enmascaran el sabor de los quesos. Aunque algunos panes que llevan nueces o aceitunas pueden resultar bien.
Puede servir los quesos rebanados o en trozos grandes, si hace esto último, asegúrese de que cada queso tenga un cuchillo diferente, para evitar contaminación de sabores.
Algunos expertos sugieren no saturar la mesa o el plato de quesos, aunque últimamente se estilan los platos muy llenos donde no se vean espacios vacío.
5. Otro elementos a tener en cuenta.
Escoja el plato donde va a servir: tablas de madera, de metal, de vidrio, de porcelana.
Incorpore elementos salados charcutería, aceitunas, pistachos, maní, pepinillos
Incorpore elementos dulces: Frutas frescas: variedades de uvas, peras, manzanas, trozos de otras frutas como mango, melón. Algunos maestros en estas artes incorporan frutas ácidas como: mandarinas, naranjas, moras, fresas. Frutas deshidratadas: orejones de durazno, ciruelas, uvas pasas, cambur, etc.
No deben faltar condimentos y preparaciones untables los cuales ser sirven en cazuelas o envases separados: mermeladas, mostazas, miel, tapenadas, patés
Juegue con elementos crujientes: crudités de vegetales como zanahoria, celery rábanos
Seleccione buenos vinos que acompañen bien todo el conjunto.
Por último: fomente el buen ánimo y la alegría durante la reunión, tome en cuenta el poder de las palabras, es decir que la conversa sea amable, bondadosa y positiva, viva la experiencia como un momento único para dar y recibir, viva el momento presente, presta atención a los compañeros de la fiesta, fluye y disfruta. La salud del cuerpo depende de la sabiduría de la mente.